LA IMPORTANCIA DE TENER UN SEGURO DE VIDA, si queremos que nuestros seres queridos tengan una vida íntegra, digna, plena y feliz, implica contraer con ellos, necesariamente, un compromiso moral: el de darles amor, cariño, alimentación, techo, vestido, salud, distracciones, protección.
Sin embargo, como dicho compromiso depende de nuestra permanencia en el mundo, tenemos la responsabilidad de protegerlos, en caso de que llegásemos a faltar, mediante mecanismos que aseguren la continuidad de su nivel de vida por un periodo, hasta que puedan valerse o generar ingresos por sí mismos.
Contar con un seguro de vida es esencial si somos el sostén económico de la familia y tenemos fuertes deudas, hijos pequeños o dependientes económicos. Los seguros de vida pueden clasificarse en tres grandes grupos, dependiendo de las necesidades de los individuos y de sus familias:
Existen dos grandes grupos de seguros de vida: los seguros de vida riesgo, que garantizan un capital en caso de fallecimiento o invalidez del asegurado, y los seguros de vida ahorro, que garantizan un capital en una fecha prefijada, habitualmente la fecha de jubilación de quien lo contrata. Hoy hablaremos de los primeros.
La importancia de contratar un seguro de vida
Cuando pensamos en tener asegurado nuestro patrimonio frente a imprevistos o accidentes, nos preocupamos por asegurar los bienes materiales que poseemos (casa, coche, negocio, etc.) y con frecuencia nos olvidamos del activo más importante que tenemos: nosotros mismos. Buscamos el mejor seguro para nuestro coche (o el más barato), el seguro de hogar con más y mejores coberturas, pero no pensamos en protegernos nosotros frente a accidentes o enfermedades.
En nuestro país tenemos poca tradición de contratar seguros de vida, si exceptuamos aquellos que los bancos nos hacen sí o sí cuando pedimos un préstamo, ya sea personal o hipotecario. No entraremos en lo ético o no de algunas de estas prácticas, pero sí os queremos resaltar lo positivo que tienen en este caso: os protegen a ti y a tu familia ante un hecho imprevisto, cancelando la deuda en caso de fallecimiento o invalidez del asegurado.
¿Sigues sin tener claro si deberías contratar o no un seguro de vida? Bien, pues aquí te mostramos algunas razones para que lo contrates:
Protege tu patrimonio
Nuestros bienes, sean muchos o pocos, nos han costado años de trabajo y sacrificios. Aunque tengamos seguros específicos que los protejan, es importante también proteger a quien consiguió esos bienes: nosotros. Solo debemos hacernos esta pregunta: ¿Cómo se arreglaría mi familia si yo faltara mañana? Si la respuesta es “mal”, ¡ya puedes correr a hacerte un seguro de vida!
Protege de deudas
Tal y como antes vimos, esta es una de las razones de más peso a la hora de decidirse por tener un seguro de vida. Tengas o no familia a tu cargo, si tienes deudas deberías tener un seguro por un capital suficiente para cancelarlas. De esta manera, en caso de sucederte una desgracia dejarás a tus seres queridos protegidos.
Protege tu empresa
En España, más del 95% de las empresas tienen menos de diez trabajadores. En este tipo de casos, lo habitual es que el dueño de la empresa, o el autónomo, sea el que gestione el día a día del negocio y, por tanto, del que depende no solo su familia sino también las de sus empleados. Si te ves reflejado en estas palabras, una buena forma de garantizar la continuidad de tu negocio es asegurando un capital que permita a tu familia mantener su estilo de vida mientras se encuentra o se forma a un nuevo gerente para la empresa.
Y tú, ¿tienes ya un seguro de vida que se adapte a lo que necesitas?